Del 21 al 25 de junio, el sur de la Costa Brava se viste de gala para acoger el torneo Del 21 al 25 de junio, el sur de la Costa Brava se viste de gala para acoger el torneo de fútbol base Costa Girona Cup, organizado conjuntamente por el Villarreal CF y Endeka Sports. Los partidos se disputan en unas instalaciones únicas en España, con 13 campos de césped natural perfectamente cuidados y situados muy cerca de una de las perlas del Mediterráneo.

Los hoteles que albergarán a jugadores, técnicos y acompañantes, se sitúan entre las poblaciones de Santa Susanna y Lloret de Mar. Esta última población es, sin duda, un destino turístico de primer orden. Más allá del aspecto puramente deportivo, la zona ofrece un sinfín de actividades familiares (parques acuáticos, deportes de aventura, museos...), y gracias a las excelentes comunicaciones, permite desplazarse hasta Barcelona en poco más de una hora, o a Girona, en unos 45 minutos.

La capital gerundense puede presumir de tener uno de los cascos antiguos más visitados (y valorados) de todo el territorio. Resulta imprescindible subir los 90 escalones que llevan hasta la Catedral (escalera que ha sido una de las localizaciones de series de renombre como Juego de Tronos) o perderse por las estrechas callejuelas de el Call (la judería). Girona dispone de magníficas instalaciones deportivas, tales como el Pabellón de Fontajau (sede de partidos ACB) o el Estadio de Montilivi (feudo del Girona FC, de segunda división). Si nos desplazamos un poco más al norte, a poco más de medía hora encontramos Figueres, ciudad natal de Salvador Dalí y cuna del surrealismo. Obligada la visita a la casa-museo que lleva el nombre del artista.

Otro de los grandes atractivos de la Costa Brava es que en relativamente pocos kilómetros, podemos pasar de las playas de aguas cristalinas a cimas de más de 2.900 metros. Los Pirineos, en Girona, cuentan con fantásticas estaciones de esquí, que en los meses más calurosos se convierten en centros de turismo de aventura.

Es difícil condensar la Costa Brava en pocas líneas: hay que verla y hay que vivirla personalmente. Y si además lo podemos hacer jugando al fútbol, que más se puede pedir?